Monasterio de Santa María de Moreruela
A poca distancia de la población de la Granja de Moreruela, desde donde a la salida del pueblo, parte la carretera que con dirección al monasterio, encontramos las ruinas de este monasterio, uno de los primeros en establecerse en la península.
Difícil es conocer la existencia de este monasterio en una etapa anterior a su período Cisterciense. Algunos autores sitúan la primera fundación de Moreruela en el siglo X, con donación de Alfonso III a San Froilán, que habría fundado así mismo el monasterio de San Salvador de Tábora. Parece que la fundación de estos monasterios sigue el plan del reino Astur-Leones, para afianzar su poder en el territorio del norte de Zamora. El monasterio tuvo un número elevado de monjes, su funcionamiento bajo una regla monástica y la exclusividad masculina, son los rasgos que definen esta etapa del monasterio. Existen dudas sobre la ubicación de esta primera fundación, pues no existe documentación alguna durante el siglo X, que defina en que lado de la ribera del Esla se produjo la edificación de este primitivo monasterio. No es hasta 1038, cuando una escritura, con la donación por la condesa Sancha del monasterio de San Antolín, especifica que el monasterio se sitúa en la ribera izquierda del Esla, y que tendría la advocación de Santiago de Moreruela. El ultimo documento existente de esta etapa es de 1042, cuando Fernando I dona varios lugares pertenecientes a su realengo al monasterio. Después de esto se produce un silencio documental sobre el monasterio, que terminara en 1143, desconociendo la situación del cenobio durante este período, especulándose con la posible desaparición temporal.
En octubre de 1143, se produce una donación de Alfonso VII al conde Ponce de Cabrera, caballero de procedencia catalana que llega a la corte castellana en el séquito de Berenguela, hija de Ramón Berenguer, que se convierte en la esposa de Alfonso VII, llegando a ser nombrado mayordomo permanente del rey. En esta donación el rey le cede la villa de Moreruela de Frades, con el mandato de apoyar la construcción y el mantenimiento de un monasterio, cuyos monjes han de mantenerse bajo la regla de San Benito.
En 1163 una bula papal ya se refiere a la advocación del monasterio como Santa María, por lo que entre los años 1158 en la que una donación del rey Fernando II todavía con el nombre de Santiago y el anteriormente mencionado del Papa en 1163, es cuando se produce la reforma en Moreruela, por tanto este sería el período fundacional cisterciense del monasterio.
Tanto Moreruela como el monasterio de nogales se benefician de las donaciones que reciben de los descendientes del Conde Ponce de Cabrera, su hija Sancha reformadora de Nogales, y los cinco hijos de ella, los tres primeros Fernando Ponce y Pedro, donan a Moreruela en 1181, bienes en San Pedro de Ceque y en Galende, y en otro documento de este mismo año dos propiedades en la costa gallega, Vionio y Faro. Su hermana María Vela, en aquel momento en el monasterio de Vega, entrega a Moreruela para después de su muerte sus posesiones en Villarmildo (1190). Un nieto del conde Fernando Fernández donará en 1204 una importante cantidad de dinero para contribuir a la construcción de la iglesia.
Fernando IV volverá a confirmar los privilegios del monasterio, concedidos por sus antecesores, Alfonso IX, Fernando III, Alfonso X y Sancho IV, en 1309.
Con el siglo XIV y particularmente durante el XV, comienza el declive económico coincidiendo con la administración con el sistema de encomienda. El monasterio intenta mantener su patrimonio y comienza a desprenderse de las posesiones mas alejadas. Durante la guerra de sucesión castellana (1475-1479), los portugueses se apoderan de las posesiones de Moreruela en el reino, incorporándolas en encomienda a la Orden de Cristo. Coincide con el declive de vocaciones y con la pérdida de efectivos que se reducirán a nueve en 1431.
Al finalizar la encomienda en el siglo XVI, con la incorporación a la Congregación Cisterciense de Castilla en 1494, el monasterio comienza a recuperarse llegando a veinticinco veintiséis frailes al final de siglo. En 1660 se produce una petición del abad D. Antonio de San Miñian y Avendaño, para sacar de la ciudad de Toro mil quinientos cántaros de vino para consumo de la comunidad, declarando estar compuesta "dentro y fuera de su casa, por treinta y cuatro monjes y cerca de sesenta criados, así mismo tiene cada año muchos huéspedes religiosos que pasan de Galicia a Castilla de nuestra orden y de San Francisco, y otros seglares por estar en desierto y camino real".
Durante los siglos XVI al XVIII, Moreruela tiene un poder menor, pero sigue conservando un patrimonio raíz y en rentas, que permitió mantener holgadamente a la comunidad, mejorando la fábrica del monasterio.
Finalmente la ocupación francesa, obliga a la comunidad el 2 de diciembre de 1809 a abandonar el cenobio, dispersándose y ocultándose hasta que 17 de junio de 1814 pueden regresar, encontrando el monasterio en estado penoso, lo que obliga a iniciar la reconstrucción y la recuperación y actualización de los arrendamientos, lo que precisara de recurrir a los tribunales con frecuencia.
Una segunda exclaustración se produce en noviembre de 1820, durante el gobierno liberal, que terminará con la restauración absolutista de 1823, regresando los monjes el 26 de junio con el mismo abad Fr. Francisco Calzada
En el libro de granos del monasterio se anota la fecha de 19 de octubre de 1835 como cierre del ejercicio debido a la exclaustración decretada, lo que produce la dispersión de la comunidad y el abandono del monasterio, siendo vendido todo su patrimonio de tierras y posesiones.
El edificio fue vendido a una persona, que decidió no destruirlo, pasando por diversos contratos, el último posesor lo destinó en su testamento, para sufragio de su alma, nombrando como cumplidor al obispo de Zamora.
El 22 de diciembre de 1934 el edificio es declarado Monumento Nacional por el gobierno de la II república
En 1943 D, Eusebio Rodríguez Fernánde-Vila, gobernador civil de Zamora, compro la dehesa de Guadaña con la abadía incluida a su propietario Joaquín Prieto Santiago, para destinarla a la cría de ganado bravo.
En 1981 el ministerio de cultura inicia los trámites de expropiación forzosa, finalizando en 1994 por parte de la Junta de Castilla y León propietaria actual del monumento. (Bibliografía)
Plano del monasterio de moreruela
1.- Iglesia
2.- Sala capitular
3.- Claustro reglar
4.- Sacristía
5.- Escalera subida al dormitorio
6.- Locutorio
7.- Pasaje a la huerta
9.- Ala de conversos
10.- Cilla
11.- Claustro de la hospedería
12.- Bodega
13.- Ala de novicios