Monasterio de Santa María de Carracedo
La tradición atribuye la fundación de este monasterio a Veremundo I que en el año 990 dona unas tierras en sus posesiones del Bierzo a monjes que huían de las incursiones de Almanzor. Pero no será hasta el año 1138 cuando se produzca la refundación y la adhesión del monasterio a la orden cisterciense, hasta ese momento seguidor de la orden benedictina. Sera la infanta Dª Sancha, hermana de Alfonso VII, la que confirme la donación y la unión al monasterio de Santa Marina de Valverde, cambiando la advocación de San Salvador a la de Santa María y recibiendo monjes de Claraval. El monasterio gracias a las donaciones de los monarcas de Castilla y León, Fernando II, Alfonso IX, Fernando III, se convierte en uno de los grandes, creando un grupo importante de filiales, hasta mediados del siglo XIV, cuando comienza la relajación y el monasterio empieza a decaer, agudizándose esta situación a partir del siglo XV, cuando comienzan los abades comendatarios. En 1505 se produce la adhesión a la congregación cisterciense de Castilla, lo que supone un renacer del monasterio acometiéndose obras de renovación durante los siguientes siglos que llevan al proyecto de sustitución de la iglesia por una nueva, proyecto que no sería terminado, por el comienzo de la guerra de la Independencia , la invasión francesa, y posteriormente en 1835 la desamortización de Mendizabal, cuando el monasterio es abandonado, siendo expoliado hasta el año 1987, cuando se inician obras de restauración, que nos llevan a la situación actual del monasterio